Brillante
victoria de Lewis Hamilton en
Hockenheim tras clavar una salida impecable que su compañero de equipo perdió
desde el primer momento, quedando cuarto tras los dos Red Bull y aun encima con
una penalización de cinco segundos que dejaba al
alemán sin esperanzas de
conseguir al menos un tercer puesto. Complicada situación para el alemán, que
pierde en casa y se aleja más del primer lugar del campeonato.
Los dos Red Bull,
alternativa única a los dos Mercedes, consiguieron sacar el mayor rédito
posible al Gran Premio de Alemania sobre todo porque han conseguido adelantar a
Ferrari en el campeonato de constructores. Max Verstappen sacaba
jugo del intento de adelantamiento de Rosberg, penalizado por la dirección de
carrera que además está bajo sospecha por parte de Mercedes, que contabilizaron
ocho segundos de parón frente a los cinco reglamentarios. Dará que hablar,
seguro.
Los
españoles han
sufrido de lo lindo en la pista, con Sainz y Alonso fuera de los puntos
tras dos carreras particulares muy duras, con pocas oportunidades para
progresar. Una pena, pero la realidad es la que es. Desde el punto de vista del
campeonato, todo de cara
para Hamilton que ya lleva 19 puntos de ventaja sobre Nico Rosberg y que se va de vacaciones sabiendo que
puede, que es posible revalidar su título.
Aun
así tiene pendiente algunos reveses porque está al límite de uso de algunas de
las piezas clave de su coche, lo cual le podrá reportar sanciones en el futuro
cercano. Lo que le queda ahora es tratar de minimizar esos golpes en las
carreras más ventajosas que tiene por delante, pero lo que es seguro es que a
la vuelta del verano tendremos una serie de puntos interesantes a los que
atender, sobre todo si se
confirma la progresión de los dos Red Bull, que también se van
a encontrar con circuitos muy favorables. Ferrari debe mejorar, sí o sí. Y a
los españoles, bueno, carreras duras por delante si no llegan novedades que
funcionen.
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