Hace poco informaban del pirateo sufrido por un Jeep Cherokee a manos de unos hackers profesionales. Se llaman Charlie Miller y Chris Valasek, una pareja que, desde el sofá de casa, ha sido capaz de volver loco al conductor de un Jeep Cherokee que circulaba por autopista.
Entraron en el Cherokee a través del sistema Uconnect y se dedicaron a conectar y desconectar el velocímetro, poner la radio a todo volumen, mostrar fotos en la pantalla multifunción de la consola central, activar los difusores de líquido limpiaparabrisas, parar el motor y perrerías de ese estilo que grabaron en un vídeo que, por supuesto, han hecho público.
Esto ha desencadenado el revuelo de algo que ya se ha comentado muchas veces, la electrónica tiene sus riesgos. Piensa que no han querido hacer más maldades por seguridad, pero el control de crucero adaptativo actúa sobre los frenos y el acelerador, el asistente de aparcamiento sobre la dirección. En teoría se podría generar un accidente a distancia.
Y las consecuencias han sido la llamada a revisión de 1,4 millones de coches Jeep, Dodge, Chrysler, Ram y Dodge Viper para distribuir un software capaz de aislar los vehículos afectados de ataques externos. Los propietarios pueden ver si su coche está entre los que deben modificarse en esta web y la marca distribuirá unos USB para que se actualice el software.
Yo lo he comentado muchas veces con amigos un poco de broma, pero cada vez parece más clara la posibilidad de un futuro apagón en el que nos veamos en plan Mad Max y donde los 2CV y similares serán los únicos supervivientes :)
Comentarios
Publicar un comentario