Ir al contenido principal

Range Rover Velar

Las líneas británicas están cambiando, y de hecho lo están haciendo para bien. La gama Range Rover cada vez se extiende más a través de una serie de modelos que ahora se ven complementados con el Range Rover Velar, un nuevo SUV de cinco plaza que se coloca justo a caballo entre el Range Rover Sport y el Range Rover Evoque.
Esta nueva referencia en el segmento de los todocamino rejuvenece aún más el abanico de modelos dentro de la marca y estrena algunos detalles que marcarán el futuro de las siguientes creaciones de Range Rover. Además, y según asegura la propia marca se ha creado con la más alta ingeniería y el empleo de materiales sostenibles, aunque no detallan cuáles.

Un todoterreno con influencias deportivas
Por fuera sus aires de familia son innegables con una gran parrilla central enmarcada por modernos faros con tecnología LED, líneas limpias tanto en el lateral como en los parachoques, y grandes llantas. Todo ello aderezado con entradas y salidas de aire, nervaduras bien marcadas y elementos tan de coupé brit integrados sin estridencias que le dan ese cierto carácter más deportivo.
En la zona superior luce especialmente marcada una línea del techo descendente que le aporta una gran dosis de dinamismo así como el empleo de pintura negra para toda la parte de arriba y el camuflaje de los pilares del habitáculo que ya hemos visto en otros integrantes de la familia Range Rover. Si pasamos al interior, el Velar destaca por una gran amplitud para sus cinco ocupantes sobre unos asientos de aspecto cómodo y muy familiares. Todo el lenguaje empleado en el interior es sutil y elegante, muy Range Rover y al mismo tiempo modernizado.
El habitáculo despliega un cargamento tecnológico descomunal con una pantalla táctil doble de 10" InControl Touch Pro Dip que engloba todas las funcionalidades multimedia mientras que un poco más abajo la consola carece de botones en favor de otro panel táctil para la climatización y otros ajustes. Por lo demás todo son líneas suaves, elegantes y de aspecto agradable al tacto. En general, un conjunto muy bien rematado con el que dan ganas de mirarlo y conducir.
Además de haber hecho hincapié en la conectividad, la tecnología también se refleja en la numerosa oferta de asistencias a la conducción en materia de seguridad y aptitudes para salirse del asfalto como el Terrain Response 2 capaz de adaptarse a cualquier situación del terreno. Faros full LED, asistente al aparcamiento, visión de 360º, reconocimiento de señales, crucero adaptativo, frenada de emergencia, asistente de carril, detección de vehículos en ángulo muerto o reconocimiento de cansancio en el conductor son algunos de los elementos de seguridad con los que se podrá equipar al Velar.
Las motorizaciones disponibles serán un total de seis: tres diésel y otros tres de gasolina repartidas en potencias desde los 180 a los 300 CV para los de gasóleo y de 250 a 380 CV para los gasolina que podrán asociarse a una caja de cambios automática ZF de ocho relaciones. Las versiones del Velar serán dos: Velar y Velar R-Dynamic, divididas a su vez en sub-versiones Standard, S, SE y HSE. Además y para el que no tenga suficiente se podrá escoger entre los paquetes Black Exterior Pack o Luxury Exterior Pack.
Por encima de todas estas versiones se comercializará durante el primer año la versión First Edition, aún más refinada que la HSE y sólo asociada al motor gasolina 3.0 V6. Además de tres colores exclusivos Corris Grey, Silicon Silver y Flux Silver en acabado satinado, añade a su equipamiento elementos del interior forrados en piel, asientos Windsor y un equipo de sonido de 1.600 W firmado por Meridian. A partir de 60.250 euros podrá rivalizar en un competido segmento contra coches de la talla del Porsche Macan, Alfa Romeo Stelvio, BMW X3 y Jaguar F-Pace, del que por cierto se tomaron prestadas algunas partes para su desarrollo. El Velar se sitúa entre estos como uno de los más lujosos y avanzados técnicamente.

Comentarios

Entradas populares de este blog

LIDAR y su utilidad para el coche autónomo

Los coches autónomos no pueden conducir por sí mismos si no son capaces de ver qué sucede en su entorno. Dependiendo de la capacidad de detección de los sensores y de la capacidad de procesamiento de datos de la computadora, el coche es capaz de realizar más o menos tareas por sí mismo, con mayor o menor intervención del humano. Se distinguen así, por tanto, hasta cinco niveles de conducción automatizada. Para que un coche pueda ver se requieren diferentes tipos de sensores que de una u otra forma lo permiten: radares, cámaras de vídeo de alta resolución, GPS inercial de alta precisión, sensores de ultrasonidos y lídares. Hoy te vamos a explicar qué es un LIDAR, uno de los sensores más habituales en los coches autónomos, y en qué consiste.

Todo sobre los cuatriciclos ligeros

Se les conoce como coches sin carnet, aunque ni son coches ni es cierto que se manejen sin un permiso de conducir. Los cuatriciclos ligeros son vehículos de cuatro ruedas cuya velocidad máxima por construcción es igual o inferior a 45 km/h y cuya tara es igual o inferior a 350 kg. La cilindrada de su motor no supera los 50 cc si es de explosión, en el resto de motores su potencia máxima se queda en 4 kW, y su número de plazas es de dos ocupantes. En cuanto a la cualidad que los distingue a nivel de marketing, para llevar un cuatriciclo ligero se exige tener en vigor el permiso de conducción de la clase AM, y también se pueden llevar con los permisos de las clases A1, A2, A y B. Para obtener el permiso AM, en general, es necesario superar un examen tipo test, de 20 preguntas, y también una prueba de dos maniobras en circuito cerrado con un ciclomotor de dos ruedas: realizar un zigzag entre jalones a velocidad reducida y circular sobre una franja de anchura limitada.

La historia X de Citroën

Bellos, estilizados, vanguardistas, esbeltos. Así fueron los Citroën que exhibieron la letra X desde los años 70 a los 90. Veinte años rindiendo pleitesía a la vanguardia y a la erótica del automóvil.  Pese a que el acervo popular afirma que es más importante insinuar que enseñar, los Citroën más X no se ruborizaban a la hora de lucir sus curvas más provocadoras. Lo cierto es que rubricaron una de las épocas más gloriosas de la marca del doble chevron con coches adelantados al tiempo en que aparecieron.  Citroën se erigió en abanderado de los diseños pasionales y las soluciones técnicas más atrevidas poniendo el contrapunto a los aburridos/serios coches alemanes.  Una apuesta arriesgada que jugueteaba con la delgada línea entre el amor y el odio, pero que nunca dejó indiferente a nadie. Y es que los Citroën que lucieron la X en su nombre fueron adalides de la creatividad y fieles defensores del confort en cualquiera de sus categorías.

Hyundai Tucson by Rockstar Performance Garage

El recién llegado Hyundai Tucson ya cuenta con diferentes preparaciones extremas y hoy os traemos una de ellas de la que ya vimos un teaser a finales del año pasado. Rockstar Performance Garaje ve el nuevo Tucson con otros ojos y así lo demostró en SEMA de Las Vegas. La base es un Tucson con motor 1.6 de gasolina turbo de 176 CV de potencia, tracción 4x4 y caja de cambios DCT de siete velocidades. Como puedes ver en las fotos por fuera los cambios no son precisamente sutiles y este Tucson parece un auténtico todoterreno. En el motor también se ha trabajado para conseguir una mayor respuesta y que esos enormes neumáticos no supongan demasiado lastre.

Zenos E10 R

En Reino Unido les encanta todo lo que huela a gasolina, pero especialmente los ligeros deportivos capaces de hacerte disfrutar como un enano. En este caso es la compañía Zenos Cars, fundada por Ansar Ali, quien presenta su segundo deportivo, el llamado Zenos E10 R, que sigue la receta del anterior E10 S, aunque es más rápido y potente que éste. El nuevo Zenos E10 R, cuya estructura está fabricada en aluminio y fibra de carbono con el objetivo de conseguir un conjunto muy ligero, de sólo 700 kilogramos, esconde un motor 2.3 litros Ecoboost de cuatro cilindros, con una potencia de 355 CV y un par motor máximo de 475 Nm, junto a una caja de cambios manual de seis velocidades.