Hay pocas sensaciones más desagradables al conducir que
la de notar que el coche que nos sigue se ha olvidado de que hay algo llamado distancia de seguridad. Claramente vas demasiado despacio
para ese otro conductor, que se pega a ti ansioso, esperando posiblemente la
ocasión para adelantarte. Pero todos hemos sido también ese coche que se acerca
mucho y no siempre nos hemos dado cuenta. ¿Y si una luz en el coche de delante nos hiciera ver que nos estamos
pegando demasiado?
Esa es la idea del proyecto Proximity Activated Stop Lamp,
que busca otorgar a la tercera luz de freno una nueva función: la de alertar al
coche que nos sigue que se está acercando demasiado. Lo mejor es que no
hablamos de algo muy difícil de implementar a nivel técnico: solo habría que
reprogramar los sensores de aparcamiento traseros que vienen ya en cada vez más
coches o añadir la función a las cámaras de visión trasera.
Claro que también
hubo un momento en el que la tercera luz de freno era solo una idea y ahora
está en todos los vehículos. ¿Será PASL habitual dentro de diez años? Está claro que una luz intermitente en el coche de
delante no detendrá a los conductores a los que les da igual la distancia de
seguridad y solo quieren adelantarte, pero podría ser muy práctico para los que simplemente se han
despistado y acercado demasiado. En situaciones de poca visibilidad,
además, facilitaría mucho las cosas.
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