El Aston Martin Vanquish Zagato es la última creación de la fructífera colaboración que arrancó en 1960 entre la marca y el carrocero italiano. Después del Vanquish Zagato Coupé lanzado al mercado en 2016 y del Vanquish Zagato Volante, desvelado el año pasado y cuya producción comenzará este año, la marca inglesa ha confirmado que un Vanquish Zagato Speedster y un Vanquish Zagato Shooting Brake se unirán a la gama Zagato.
El Vanquish Zagato Speedster hará su debut en breve en el Concurso de Elegancia de Pebble Beach, mientras que del Vanquish Shooting Brake la marca solo ha publicado un boceto.
El Vanquish S vestido por uno de los mejores sastres italianos
Tanto el Speedster como el Shooting Brake, al igual que el resto de los Vanquish Zagato, toman por base el Aston Martin Vanquish S y su V12 atmosférico de 6.0 litros y 600 CV asociado al cambio automático Touchtronic III de 8 relaciones. La suspensión adaptativa del Vanquish S tendrá una puesta a punto específica en cada una de las nuevas versiones.
De las dos nuevas versiones, todavía no hay datos sobre sus prestaciones, pero sí se sabe que el Vanquish Zagato Coupé cubre el 0 a 100 km/h en 3,5 s y la versión Volante en 3,9 s. En el caso del Coupé es un tiempo idéntico al Vanquish S de serie. Con las dos nuevas carrocerías, la familia Aston Martin Vanquish Zagato tendrá 325 integrantes: 99 Coupé, 99 Volante, 28 Speedster y 99 Shooting Brake.
Aston Martin, Zagato y los Shooting Brake: la fórmula ganadora
Las series especiales y limitadas son muchas veces lo que permiten a las marcas de lujo dar un empujón a sus beneficios, al mismo tiempo que afianzan su imagen de marca. Aston Martin es un especialista en crear series de este tipo, ya sea con la colaboración de Zagato o con los Shooting Brake. Con el primero, la colaboración comenzó en el Salón de Londres de 1960, celebrado en Earl's Court. Allí, Aston Martin presentó la versión Zagato del DB4 GT, sencillamente bautizada DB4 GTZ.
Además de un diseño espectacular el coche era mucho más ligero que el DB4 GT que tomaba por base. Sólo se fabricaron 19 unidades y sus carrocerías de aluminio fueron moldeadas a mano en la sede milanesa de Zagato. En cuanto a la historia de amor entre los Shooting Brakes y Aston Martin, se la debemos también a Sir David Brown, quién se hizo fabricar un DB5 Shooting Brake para su uso personal. Hasta que sus amigos y clientes también querían uno. Y así desde 1967.
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