Ir al contenido principal

Bentley Continental GT Convertible Galene Edition

Bentley suele cubrir cubrir cuidadosamente todos los nichos del mercado de lujo. ¿Amante de la cetrería? Aquí tienes tu Bentayga Falconry. ¿Que eres vegano? Toma interiores hechos de setas. ¿Que eres fiestero? No olvides sacar esta noche tu Bentayga Mulliner con enfriador de botellas y equipo de sonido de casi 2.000 vatios.
Y si te gusta el mar y quieres un Bentley a juego con tu yate, estás de enhorabuena porque la firma británica acaba de presentar el Bentley Continental GT Convertible Galene Edition. Una edición limitada a 30 ejemplares en todo el mundo inspirada en la diosa griega de los mares en calma y en cuyo corazón late un motor V8 4.0 Twin-Turbo con 507 CV y 660 Nm de par máximo.

Opulencia marítima
Mulliner, la división de personalización de Bentley, ha creado este barco convertible sobre ruedas en colaboración con los expertos británicos en yates Princess Yatch. El diseño ha querido emular las líneas limpias del mar y el brillo de las aguas cristalinas con pintura Glacier White combinada con detalles en Sequin Blue y un kit de carrocería a juego.
La capota de color azul oscuro, retráctil y de cuatro capas mantiene a los ocupantes en el mismo oasis de traquilidad que en el Continetal GT. Unas llantas de 21 pulgadas completan la firma externa de Mulliner en la edición Galene.
En el habitáculo, Mulliner se adapta a una combinación de lino, Portland, Brunel y cuero de color camel. La pintura Glacier White decora algunos de los detalles de la cabina, y el ilustrador Jaume Vilardell adorna el panel delantero con la imagen de un súper yate en el salpicadero. El nogal es el nuevo protagonista de este modelo: decora la consola central, los alrededores de la palanca de cambio y todo el suelo del maletero. 
Un homenaje a la opulencia clásica. Bajo el capó no hay novedades reseñables: el Bentley Continental GT Convertible Galene Edition es propulsado por un motor V8 de 4.0 litros Twin-Turbo con 507 CV y 660 Nm de par máximo. Llega a los 100 km/h en 5 segundos y alcanza una velocidad máxima de 301 km/h. Sobre el asfalto, no sobre las olas.

Comentarios

Entradas populares de este blog

LIDAR y su utilidad para el coche autónomo

Los coches autónomos no pueden conducir por sí mismos si no son capaces de ver qué sucede en su entorno. Dependiendo de la capacidad de detección de los sensores y de la capacidad de procesamiento de datos de la computadora, el coche es capaz de realizar más o menos tareas por sí mismo, con mayor o menor intervención del humano. Se distinguen así, por tanto, hasta cinco niveles de conducción automatizada. Para que un coche pueda ver se requieren diferentes tipos de sensores que de una u otra forma lo permiten: radares, cámaras de vídeo de alta resolución, GPS inercial de alta precisión, sensores de ultrasonidos y lídares. Hoy te vamos a explicar qué es un LIDAR, uno de los sensores más habituales en los coches autónomos, y en qué consiste.

Todo sobre los cuatriciclos ligeros

Se les conoce como coches sin carnet, aunque ni son coches ni es cierto que se manejen sin un permiso de conducir. Los cuatriciclos ligeros son vehículos de cuatro ruedas cuya velocidad máxima por construcción es igual o inferior a 45 km/h y cuya tara es igual o inferior a 350 kg. La cilindrada de su motor no supera los 50 cc si es de explosión, en el resto de motores su potencia máxima se queda en 4 kW, y su número de plazas es de dos ocupantes. En cuanto a la cualidad que los distingue a nivel de marketing, para llevar un cuatriciclo ligero se exige tener en vigor el permiso de conducción de la clase AM, y también se pueden llevar con los permisos de las clases A1, A2, A y B. Para obtener el permiso AM, en general, es necesario superar un examen tipo test, de 20 preguntas, y también una prueba de dos maniobras en circuito cerrado con un ciclomotor de dos ruedas: realizar un zigzag entre jalones a velocidad reducida y circular sobre una franja de anchura limitada.

La historia X de Citroën

Bellos, estilizados, vanguardistas, esbeltos. Así fueron los Citroën que exhibieron la letra X desde los años 70 a los 90. Veinte años rindiendo pleitesía a la vanguardia y a la erótica del automóvil.  Pese a que el acervo popular afirma que es más importante insinuar que enseñar, los Citroën más X no se ruborizaban a la hora de lucir sus curvas más provocadoras. Lo cierto es que rubricaron una de las épocas más gloriosas de la marca del doble chevron con coches adelantados al tiempo en que aparecieron.  Citroën se erigió en abanderado de los diseños pasionales y las soluciones técnicas más atrevidas poniendo el contrapunto a los aburridos/serios coches alemanes.  Una apuesta arriesgada que jugueteaba con la delgada línea entre el amor y el odio, pero que nunca dejó indiferente a nadie. Y es que los Citroën que lucieron la X en su nombre fueron adalides de la creatividad y fieles defensores del confort en cualquiera de sus categorías.

Hyundai Tucson by Rockstar Performance Garage

El recién llegado Hyundai Tucson ya cuenta con diferentes preparaciones extremas y hoy os traemos una de ellas de la que ya vimos un teaser a finales del año pasado. Rockstar Performance Garaje ve el nuevo Tucson con otros ojos y así lo demostró en SEMA de Las Vegas. La base es un Tucson con motor 1.6 de gasolina turbo de 176 CV de potencia, tracción 4x4 y caja de cambios DCT de siete velocidades. Como puedes ver en las fotos por fuera los cambios no son precisamente sutiles y este Tucson parece un auténtico todoterreno. En el motor también se ha trabajado para conseguir una mayor respuesta y que esos enormes neumáticos no supongan demasiado lastre.

Zenos E10 R

En Reino Unido les encanta todo lo que huela a gasolina, pero especialmente los ligeros deportivos capaces de hacerte disfrutar como un enano. En este caso es la compañía Zenos Cars, fundada por Ansar Ali, quien presenta su segundo deportivo, el llamado Zenos E10 R, que sigue la receta del anterior E10 S, aunque es más rápido y potente que éste. El nuevo Zenos E10 R, cuya estructura está fabricada en aluminio y fibra de carbono con el objetivo de conseguir un conjunto muy ligero, de sólo 700 kilogramos, esconde un motor 2.3 litros Ecoboost de cuatro cilindros, con una potencia de 355 CV y un par motor máximo de 475 Nm, junto a una caja de cambios manual de seis velocidades.