
La unidad de cuatro cilindros de 1.8 litros combina la potencia máxima de 280 CV a 6.000 rpm con un par máximo de 390 Nm, posicionándolo como un rival muy a tener en cuenta para esta nueva generación de deportivos compactos y avivando la guerra por Nürburgring. Además, Renault Sport introducirá una versión Trophy de 300 CV del nuevo R.S a finales de 2018.
El Mégane más prestacional

Por primera vez, el nuevo Mégane R.S se puede configurar con dos tipos de transmisión: una caja de cambios manual de seis velocidades o una transmisión de doble embrague EDC de seis velocidades que incluirá levas en el volante. El estilo incorpora numerosas señales del mundo del automovilismo, incluyendo un difusor trasero, y una parrilla con patrón de panal 3D que ha sido revisada por Renault Sport. Mientras tanto, los flancos esculpidos, que son un sello distintivo del Renault Mégane se acentúan con las aletas ensanchadas de la versión R.S.

Y el volante deportivo cuenta con un marcador rojo en la parte superior y un emblema RS en la parte inferior. La versión deportiva viene equipada con el sistema Multi-Sense de Renault que ofrece a los conductores la posibilidad de elegir entre cinco modos de conducción: Comfort, Normal, Sport, Race y Perso. También viene con una serie de ayudas para el conductor que se pueden activar o desactivar con la tableta R-LINK 2. De momento no se han revelado especificaciones en cuanto a la fecha exacta de comercialización, precio o equipamiento de serie, pero sí ha adelantado que Renault Sport introducirá una versión Trophy de 300 CV del nuevo R.S a finales de 2018.
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